Hace una semana, te hablé sobre cómo manejar la motivación para potenciar tu rendimiento profesional. Sin embargo, existen otros aspectos que, de forma indirecta, también influyen en la calidad de tu trabajo. En este caso, me refiero a los estímulos externos.
Silencio, bullicio, música, sonido ambiente… la variedad de estímulos auditivos que te envuelven mientras desarrollas tu labor profesional es enorme. Debido a esto, el oído no es un sentido que haya que obviar, ya que lo que percibes mientras trabajas tiene mucho impacto en tu rendimiento.
Por ello, hoy te voy a hablar de la influencia de estos estímulos y sobre cómo aprovechar la música para mejorar tu desempeño.
Entorno, neurotransmisores y emociones
El ambiente que te rodea durante cualquier actividad, sea o no profesional, influye más de lo que parece en cómo te desenvuelves. De hecho, en función del entorno, tu cuerpo genera ciertos neurotransmisores, que pueden llegar a favorecer o a perjudicar tu rendimiento.
En este enlace te hablo, entre otras cosas, del impacto del contexto en el desempeño laboral.
Como hoy estamos hablando sobre el oído, vamos a ver cómo influye cada estímulo auditivo.
En primer lugar, un ambiente sonoro agradable y tranquilo suele disminuir la producción de los neurotransmisores ligados al estrés y a la aceleración del ritmo cardiovascular, como el cortisol o la adrenalina.
Por el contrario, lo que se genera es una mayor cantidad de serotonina e, incluso, de dopamina, relacionadas con la felicidad y la motivación respectivamente. En consecuencia, te sientes más centrado/a y tus ganas de trabajar aumentan, mejorando tu productividad y la calidad de tu labor.
Sin embargo, en entornos en los que el bullicio y el ruido predominan, se tiende a generar cortisol, lo cual aumenta exponencialmente el estrés. Por ello, se bloquean las funciones ejecutivas del cerebro, lo que causa que la capacidad de razonamiento disminuya.
Esta ausencia de generación de serotonina y dopamina deriva en trabajadores tristes, estresados y desmotivados. ¿Cómo se puede evitar esta bola de nieve?
Utiliza la música a tu favor
Pues bien, entre otras cosas, una manera de favorecer el bienestar en el ámbito laboral y de aumentar la motivación de las personas que forman parte de una empresa, es crear un ambiente sonoro adecuado.
La música irrumpe aquí como un gran aliciente para potenciar la producción de neurotransmisores positivos. Pero ¡cuidado! No todo vale.
Una de las mejores opciones es escoger música suave, con ritmos lentos. Esta es la más adecuada para evocar situaciones de calma en nuestra mente, lo cual favorece la generación de serotonina (felicidad) y previene los aumentos de estrés a causa del trabajo.
Por otro lado, también existe la posibilidad de utilizar música más movida. Sin embargo, debes andar con preocupación. Los ritmos más acelerados te pueden llevar a generar demasiada adrenalina. Esto provoca una disminución de tu concentración.
En último lugar, siempre puedes optar por el silencio. El silencio es la máxima expresión de la tranquilidad. Es más complicado experimentar estrés y bloqueo en un entorno completamente calmado. Sin embargo, también es el aspecto más difícil de lograr, especialmente si compartes espacio de trabajo.
Estos consejos son aplicables tanto si escuchas música con auriculares, como si la música se reproduce por altavoz y la escuchan todos los trabajadores.
Espero que te hayan resultado útiles estos consejos ¿Cuál es la opción que más te define o que sueles utilizar? Te leo en los comentarios. ¡Un saludo!
